Percibe cinco palitos por mes, el equivalente a 21 jubilaciones mínimas (con bono congelado incluido).
Manuel Adorni dejó en claro en los últimos días que desconoce el concepto de empatía. Y es que, después del descarado asado de festejo en la Quinta de Olivos dedicado a los «84 héroes» radicales que avalaron el veto a la ampliación jubilatoria, el vocero presidencial recibió como «premio» un nuevo ascenso: ahora tiene rango de ministro y cobra más de cinco millones de pesos por mes.
Sin lugar a dudas, Adorni es el funcionario que más escaló durante la administración de Javier Milei. Su primera designación llegó el 29 de noviembre del 2023, sólo días días después de que el por entonces candidato libertario se impusiera en el ballotage con Sergio Massa.
Pero, cabe recordar, no fue la primera elección del presidente. La propuesta llegó a sus manos sólo después de que Marina Calabró rechazara reemplazar a Gabriela Cerruti, portavoz del Gobierno de Alberto Fernández.
De esta forma, Adorni asumió como titular de la Subsecretaría de Vocería y Comunicación. ¿El sueldo estimado en diciembre del 2023? Nada más y nada menos que $2.981.513. Ese mes, los jubilados cobraron el último aumento de la gestión de Unión por la Patria (20,87%) y el bono de 55 mil pesos, lo que les significó una transferencia a sus bolsillos de $160.713.
Bombita: el primer sueldo de Adorni en la administración de La Libertad Avaza equivalía a casi 19 jubilaciones mínimas (con el bono incluido).
Tirarse arriba de cada una de las granadas del Gobierno tuvo su premio. En el mes de abril, el vocero presidencial volvió a recibir el respaldo de Milei, quien decidió asignarle el rango y jerarquía de Secretario de Estado.
La designación se publicó en el Boletín Oficial mediante el decreto 323/2024 y contó con la firma del presidente y del luego eyectado jefe de Gabinete, Nicolás Posse. Consultado por su nuevo sueldo, el vocero presidencial esquivó: «Creo que hay una diferencia, menor, pero hay una diferencia».
Pero, ¿de cuánto fue el aumento? Adorni pasó de cobrar $2.981.513 a $4.00.000, el equivalente a 14 jubilaciones mínimas de abril con el bono incluido. En concreto, se trató de un incremento del 34%. Si se tiene en cuenta que la inflación acumulada entre el mes de diciembre y marzo fue del 70,3%, bien podría decirse que corrió detrás de la suba de precios.
Pero la realidad es otra: durante esos meses, muy pocos gremios habían renovado sus paritarias, por lo que la mayoría de los argentinos y argentinas no había recibido ninguna actualización salarial desde la asunción de los libertarios.
Idéntico fue el caso de los jubilados, quienes en el mes de diciembre tuvieron una leve suba (condicionada por el pago del bono y del medio aguilando), pero luego sus haberes quedaron congelados hasta la primera actualización del mes de marzo.
Evolución inflación y jubilaciones mínimas en la era Milei
Diciembre
- Inflación: 25.5%
- Haber mínimo: $323.299
- Adicionales: bono y el medio aguilando.
Enero
- Inflación: 20.6%
- Haber mínimo: $268.076
- Adicionales: bono congelado.
Febrero
- Inflación: 13.2%
- Haber mínimo: $236.816
- Adicionales: bono congelado.
Marzo
- Inflación: 11%
- Haber mínimo: $271.404
- Adicionales: bono congelado.
Mientras el poder adquisitivo de los jubilados se licuaba mes a mes, el bolsillo de Adorni se engrosaba de forma sabrosa. Abril fue un mes de festejos múltiples para el vocero presidencial, quien no sólo celebró su ascenso a Secretario, sino que su hermano, Francisco Adorni, también subió posiciones en la administración libertaria.
El hermano del vocero había sido designado en enero asesor del Ministerio de Defensa (con un sueldo de $2.6 millones), pero en abril fue ascendido a auditor y su sueldo se empató con el de su hermano: $4.000.000. Nada mal para el ex dueño de un bazar.
Del «a nosotros no nos importa el rating», a «empatía, ¿qué es eso?»
Pese al estrepitoso fracaso de la cadena nacional con la que Milei presentó el presupuesto en el Congreso y al escandaloso asado organizado en el Quincho de Olivos para celebrar el ajuste a los jubilados, Adorni recibió otro mimo presidencial y fue ascendido a ministro, con un incremento del 25% que elevó su sueldo a $5.000.000.
En los primeros diez meses de la administración libertaria, el vocero presidencial recibió ya dos ascensos y fue premiado con un 67% de aumento, una paritaria que ningún otro trabajador tuvo durante la era Milei.