La operación, llamada «promesa honesta», fue «lanzada con la aprobación del Consejo Superior de Seguridad Nacional y bajo la supervisión del Estado Mayor general de las Fuerzas Armadas», precisó a la televisión, indicando que los detalles se pondrían pronto «en conocimiento del heroico pueblo de Irán y de los combatientes de la libertad de todo el mundo».La agencia oficial de noticias IRNA precisó que, casi una hora después del lanzamiento de los drones, los Guardianes dispararon una «primera tanda de misiles balísticos contra objetivos situados en zonas profundas de los territorios ocupados (Israel)».
Pocos minutos después del inicio de la operación, la cuenta en la red social X del guía supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, volvió a publicar un mensaje que afirmaba que «el régimen diabólico será castigado».
El 3 de abril, el ayatolá Jamenei declaró que Israel recibiría «una bofetada» tras el bombardeo, que Irán atribuyó al Estado hebreo, contra el consulado iraní en Damasco, en el que murieron dos días antes siete miembros de los Guardianes de la Revolución, entre ellos dos generales de la Fuerza Quds, su brazo de operaciones exteriores.